martes, 6 de mayo de 2014

Guía práctica para un día de elecciones.


Dentro de nada nos toca votar y cada vez que toca votar se plantea el dilema de qué hacer. Cada cual tomará una decisión y todas ellas son perfectamente respetables... No, en realidad no, de hecho ninguna de las decisiones es respetada por nadie. En serio, hagáis lo que hagáis siempre tendréis a alguien cerca para deciros que la habéis cagado. Pero ya que la vais a cagar, hacedlo con conocimiento. Por eso planteo aquí con toda la objetividad que me puedo permitir, las diversas opciones que tenéis, con los pros y los contras de cada una.


ABSTENCIÓN: Es, así a grandes rasgos, limpiarte el culo con tu derecho a voto.
  • Pros - No hay que andar.
  • Contras - No importa lo que quieras reivindicar con esta decisión porque a ojos de todo el mundo quedarás como un vago y punto. Cuantas más abstenciones hayan más estruendosas y malvadas serán las carcajadas de quien gane.
VOTO NULO: Meter billetes de monopoly en los sobres, manchar de heces de perro las papeletas, escribir consignas pegadizas o frases célebres de Gandi. Hay mil formas de votar nulo.
  • Pros - Agudiza el ingenio.
  • Contras - Como acto simbólico está muy bien pero a efectos prácticos es exactamente lo mismo que quedarse en casa. Pensadlo bien, ninguna democracia seria (ni la nuestra tampoco) se plantea contabilizar una rodaja de chorizo en unas elecciones.
VOTO EN BLANCO: Es tan fácil y soso como votar con un sobre vacío.
  • Pros - Ninguno.
  • Contras - Hay una razón por la que el voto en blanco no se cuenta como nulo y es que hace un favor enorme a los grandes partidos. Pensad en quién os recomendó votar en blanco y preguntadle quién se lo recomendó a él e intentad informaros sobre quien recomendó al recomendador de vuestro recomendador. Si llegáis hasta el final descubriréis que esta cadena de susurros al oído la inició Manuel Fraga en 1982 en una cafetería de Majadahonda para asegurarse de que PP y PSOE se quedaban solos. "Me han dicho que si no sabes a quién votar, lo mejor es votar en blanco con un sobre vacío. Que luego te mandan a casa ese mismo sobre pero lleno de caramelos de drácula." ¡MENTIRA! A diferencia del voto nulo y la abstención, el voto en blanco sí se cuenta como voto válido. Aunque en principio no va para nadie, ocupa un porcentaje en el recuento total y ese porcentaje se lo resta a todos los demás partidos. A los grandes les da igual, pero los pequeños deben llegar al 3% del voto para optar a un escaño. Si no lo hacen, todos sus votantes se joden y ven su voto sin representación alguna. Y como hay que ocupar todos los escaños, esos asientos se los reparten entre los que sí han llegado al 3%.
VOTAR A ESCAÑOS EN BLANCO: Se presentan como un partido pero no los son como tal, ya que no hacen propuesta alguna ni hacen nada. Sólo dejan su escaño vacío.
  • Pros - Aquel que esté votando en blanco posiblemente lo que busque sea esto. Si no te representa ningún partido vota al partido de los no representados. Es de cajón.
  • Contras - Queda feo eso de dejar un asiento vacío en el congreso. Si pusieran una jardinera o algo tendrían mi voto (es más barato de mantener un geranio que un diputado).
 VOTAR A PP O A PSOE: Sí, ya sabéis. Que si os tragáis las gilipolleces esas del voto útil o disfrutáis viendo a Rajoy y Rubalcaba representando canciones de Pimpinela sin música, esta es vuestra opción.
  • Pros - El partido al que votes va a ganar o va a quedar segundo. Lo cual está muy bien si no entiendes la diferencia entre un equipo de fútbol y un partido político. Puedes salir a celebrarlo y ponerte piripi.
  • Contras - Vas a sentir vergüenza tarde o temprano. Y lo sabes.
VOTAR A OTRO: Todo aquel que no sea PP o PSOE. Hay tantas opciones y tan variadas que es difícil que no te guste ninguna.
  • Pros - Forman parte de la oposición. Son la única barrera que impide que el presidente implante el derecho de carnada o mande construir una gigantesca pirámide de diamante para recordarlo. Cuanto más grande sea esa barrera más les costará ser unos malditos hijos de puta.
  • Contras - No van a ganar. Te pierdes la fiesta, aunque siempre puedes apuntarte a los festejos de quien gane, que con tus impuestos como mínimo habrán comprado papas. También es probable que en el partido que has votado se meta de estragis algún parásito corrupto pero no es razón para desanimarse, que nadie mata a su perro por tener pulgas. Un poco de fuego lo limpia todo.